Esta torta recibe su nombre de la traducción del alemán, Bienenstich, o sea picadura de abejas. Cuando uno lee el nombre supone que es una torta de miel, pero no es así. Su nombre lo recibió de el panadero de Andernach y sus aprendices. Resulta que en 1474 los habitantes de Linz am Rhein planeaban un ataque a la ciudad vecina de Andernach, ya que fueron desposeídos por parte del emperador de sus derechos de cobrar un impuesto por permitir a los barcos cruzar el río. Dos aprendices de panadería recorrieron los muros de la ciudad de Andernach y comieron de los nidos de abejas que se encontraban allí y cuando vieron que estaban siendo atacados les tiraron los nidos de abeja encima y estos asustados, tuvieron que huir tras ser picados por las abejas. Para festejar el triunfo inventaron esta torta en honor a las abejas.
Esta es otra más de las historias que hay detrás de las tortas , no se si será cierta pero la verdad es que es muy pintoresca.
Cuando era chica las monjas alemanas preparaban esta torta y la cortaban así, en forma de cuadrado, y la servían junto con las facturas. El resultado es una masa muy suave , similar a al brioche y con el agregado del crujiente de las almendras. Esta vez preparé la mitad de la receta que les indico más abajo. Me pareció que quedó un poco alta con respecto a lo que yo la conocía. Para la próxima deberé usar un molde más grande, el de 23 cm x 23 cm va a andar bien. Esta torta la tenía pendiente de preparar hace ya un tiempo como le comentaba a Margret. La receta es de Blanca Cotta una cocinera argentina que es una maravilla en todo sentido.
¿Alguna vez te picó una abeja? A mí, una avispa, supongo que es parecido. ¡Qué dolor!
¿Alguna vez te picó una abeja? A mí, una avispa, supongo que es parecido. ¡Qué dolor!
Masa
1/2 kg harina 0000 (de repostería)
50 gs levadura fresca
125 cc agua tibia
1 huevo
120 gs azúcar
60 gs manteca (mantequilla)
250 cc leche
ralladura de un limón
pizca de sal
Cubierta
100 gs manteca (mantequilla)
125 gs almendras sin piel
100 gs azúcar
2 cucharadas leche
esencia de vainilla
Relleno
250 gs crema (nata)
3 cucharadas azúcar
Decoración
azúcar impalpable
Formar una esponja con la levadura, el agua tibia, una cucharadita de azúcar y una cucharada de harina. Dejar que espume y agregarle luego el huevo, el azúcar, la manteca derretida (no caliente), la leche tibia, la ralladura del limón y la pizca de sal. Mezclar todo esto e ir incorporando la harina de a poco hasta formar un bollo tierno y liso. Dejar levar en un bowl tapado hasta que duplique su volumen.
Mientras tanto picar la almendras y ponerlas en una cacerolita junto con el azúcar y la manteca. Revolver hasta que se funda la manteca con el azúcar. Retirar del fuego y agregar la leche y la esencia. Reservar.
Tomar la masa leudada y extender en una placa enmantecada y enharinada. Darle 2 cm de espesor, dejar levar otra vez, tapada con un paño. Cuando haya levado colocar la mezcla de almendras sobre la superficie y llevar a un horno medio hasta que la superficie se dore. Esto va a ser como unos 40 minutos, más o menos. Batir la crema junto con el azúcar y reservar en la heladera hasta el momento de usar.
Retirar y dejar enfriar del todo, cortar al medio y rellenar con la crema chantilly. Cortar en cuadrados y servir espolvoreando con azúcar impalpable.
El nombre es muy curioso y la tarta una delicia.
ResponderEliminarUn beso
El aspecto y textura se ven excelentes, eso si, el nombre me cuesta decirlo en voz alta hehe.
ResponderEliminarBesetes!
Se ve muy bien, voy a probarla...
ResponderEliminarTu torta tiene un aspecto increíble... y me ha encantado la historia ;)
ResponderEliminarHola!
ResponderEliminarla historia de las abejas curiosa!!
la tarta muy esponjosa.
http://elbocadodelahuerta.blogspot.com/
La historia de donde viene la tarta me ha gustado mucho y la tarta ha de estar deliciosa.
ResponderEliminarun besazo
Luce buenísima, este tipo de torta me gusta mucho. Una tentación tenerla en casa, creo que me la pasaría picando la torta como abejita jiji.
ResponderEliminarun beso,
Me ha encantado y con tú permiso me la llevo, no la conocía pero me encanta tener este tipo de recetas, me la apunto en pendientes.
ResponderEliminarSaludos
jeje, excelente historia. y Blanca Cotta una grosa total, siempre me gustó como redactaba sus recetas, los bocadillos que metía en el medio de la explicación, y el "de acá, de allá y de mi mamá también" o algo así... jejeje
ResponderEliminar¡Saludos!
Excelente torta!!! Qué esponjosa y el crocante de arriba debe ser una locura...Me encantó la historia del nombre!!! Besos!!
ResponderEliminarSe ve con un a pintorra tremenda, la traducción es de lo más curioso, un besote y buen finde.
ResponderEliminarLo primero que me llamó la atención de la receta fue el nombre, muy divertido y después fue que la masa está hecha por ti y yo pensaba que era hojaldre...
ResponderEliminarMagnífica y deliciosa.
Besos y buen fin de semana.
Se ve deliciosa, la historia es muy pintoresca, nunca la había oido.
ResponderEliminarPero buen esa historia a dado paso a una torta muy rica.
Besitos,
No me lo puedo creer! jajaja! la hice hace bien poco y la tenía en pendientes. Me acordé de ella cuando me llegó la miel de la libélula:-) y es que mira que tenemos los mismo gustos:-D Se ve deliciosa, Besos
ResponderEliminarCurioso saber de dónde viene el nombre de esta tarta!
ResponderEliminarSe ve buenísima!!!!!
QUE RIQUISIMA TORTA ..LA HISTORIA MUY INTERESANTE .BSSSS MARIMI
ResponderEliminarNo conocía para nada la historia de este kuchen, me encanta, en el sur de Chile es típico y aquí se vende bastante también, todo un clásico y que rico se ve.
ResponderEliminarBesos
Erika, si que tiene una historia la mar de pintoresca, me encantan las comidas con historias interesantes, parecen que saben mejor....verdaderamente ta ha quedao eslendida, se ve fenomenal.
ResponderEliminarbsss y espero que la disfrutaras tanto como yo he elido tu historia.
bsss desde Almeria.
Se ve delicada y suave.
ResponderEliminarBesos
me ha parecido muy curioso lo del nombre de la torta. Se ve deliciosa!
ResponderEliminarbs!
Alguien la hizo?
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